Noticia: Aprobado el decreto del carbón tras el plácet europeo
Periódico: El país. com
Fecha de publicación: Madrid, 02/10/2010
Tema: Se compensará a las compañías eléctricas que utilicen carbón autóctono, que es más costoso y sucio que el mineral importado.
Los temas más destacados que se pueden tratar en torno a esta noticia son la eficiencia, y las externalidades negativas.
Relación con la teoría:
La mayoría de las transacciones comerciales que se realizan dentro de una economía de mercado mejoran la eficiencia, porque ambas partes salen beneficiadas, pero en este caso el mercado del carbón no ha sido regulado por la oferta y la demanda, la decisión no ha sido tomada dentro de un sistema de mercado, sino por una decisión gubernamental con el objetivo de mitigar las protestas.
La eficiencia significa que los recursos de la economía se utilizan lo más eficazmente posible para satisfacer las necesidades y deseos de los individuos. Cuando una economía es eficiente se encuentra en la frontera de posibilidades de producción, pero en este caso los recursos están siendo malgastados, no se produciendo carbón de una manera eficiente, por lo que la economía española se encuentra dentro de la frontera de posibilidades de producción.
La regla del menor coste dice que una empresa debe comprar insumos hasta que los productos marginales por euro gastado en cada factor de producción sean iguales, pero en este caso, el estado va a compensar a las compañías eléctricas que utilicen carbón autóctono, que tiene mayores costes y además es más sucio que el mineral importado, por lo que no se está cumpliendo con esta regla que hace que la economía sea más eficiente.
Las externalidades se presentan cuando las empresas o personas toman decisiones que generan efectos, imponen costes y beneficios sobre terceros fuera del mercado.
En este caso nos encontramos ante una externalidad negativa, que es la contaminación ambiental que supone la actividad minera y el uso de este tipo de carbón por parte de las compañías eléctricas.
Normalmente los estados hacen regulaciones gubernamentales para tener controladas este tipo de externalidades, pero aquí vemos el caso contrario, ya que favorecen el uso de este carbón. Los estados suelen establecer impuestos para compensar el coste que la actividad le supone a la sociedad, el impuesto debería reflejar este daño, pero aquí no solo no refleja el daño, si no que contribuye a él, por eso los grupos ecologistas se manifiestan en contra de la aplicación de este real decreto.
Opinión objetiva:
El gobierno español y Bruselas han elegido entre la eficiencia de los mercados y la equidad benéfica de la intervención estatal y se han quedado con esta última, con el objetivo de mitigar las protestas de la minería.
Opinión subjetiva:
Para que la economía española fuese eficiente, el gobierno español y Bruselas deberían haber optado por que fuesen la oferta y la demanda las que regularan el mercado del carbón, pero esto hubiese supuesto que las empresas dedicadas a ello desapareciesen, ya que las empresas que no producen de forma adecuada, producen más de lo necesario y malgastan sus recursos acaban por desaparecer.
Esta situación no es tolerable por el estado benefactor y menos aun en la situación de crisis económica que vivimos ahora, por eso han optado por compensar a las eléctricas que utilicen carbón autóctono, al menos hasta el 31 de diciembre de 2014.
El que una economía sea eficiente no quiere decir que se produzca una distribución justa del ingreso. Si el mercado se hubiese regulado solo muchos trabajadores del sector de la minería hubiesen pasado a engrosar más aun las listas del paro, por lo que el estado tendría que realizar algún tipo de medida para reciclar los conocimientos de estos trabajadores, para que pudiesen reincorporarse al mundo laboral en otro sector más eficiente.
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